Durante los últimos años, Gemini ha sido el asistente que mandaba en los móviles Galaxy gracias a la alianza entre Google y Samsung. Ahora, la marca surcoreana se está planteando un giro de guion: reimpulsar Bixby apoyándose en una nueva inteligencia artificial externa y reservar a Gemini un papel menos central en algunos modelos, incluidos los futuros Galaxy S26. El movimiento, todavía en fase de filtraciones, apunta a una estrategia más ambiciosa de control sobre la experiencia de IA en sus dispositivos.
Del dominio de Gemini al regreso de Bixby
Bixby nació como el asistente propio de Samsung y se extendió a prácticamente todo su ecosistema: móviles, televisores, altavoces o incluso frigoríficos conectados. Pese a esa presencia masiva, nunca llegó a destacar frente a alternativas como el Asistente de Google, Alexa o Siri. En muchos casos se percibía como una capa extra que aportaba poco valor más allá del control básico de dispositivos del hogar.
La llegada de la nueva ola de IA dejó a Bixby todavía más atrás. Mientras los chatbots de compañías como Google o plataformas como ChatGPT ganaban en capacidades conversacionales y comprensión del contexto, el asistente de Samsung se quedaba anclado en funciones más simples. De ahí que la compañía optara por integrar Gemini como asistente predeterminado en sus móviles, confiando en la potencia de la IA de Google para no quedarse fuera de juego en esta nueva etapa.
Ahora, sin embargo, los planes parecen cambiar. Informes recientes apuntan a que Samsung estudia volver a colocar a Bixby en el centro de la experiencia, al menos en algunos modelos de gama alta como los Galaxy S26, apoyándose en una colaboración con una compañía de IA que, según estas filtraciones, habría demostrado ser incluso mejor que Gemini en determinados escenarios de uso.
Perplexity se suma a la ecuación
La clave del giro estaría en la integración de Perplexity, una empresa de inteligencia artificial que aportaría a Bixby capacidades similares a las de Gemini. Según un filtrador en la red social X, el asistente de Samsung se apoyaría en esta tecnología para ponerse al día en funciones avanzadas y poder disputar directamente el terreno de los grandes chatbots que dominan el mercado.
El reparto de tareas sería claro: las consultas más complejas -las que requieren búsquedas en la web, respuestas elaboradas o contexto adicional- se enviarían a Perplexity, mientras que Bixby se encargaría de las órdenes básicas como añadir recordatorios, activar alarmas o gestionar funciones rápidas del dispositivo. En la práctica, el usuario interactuaría con Bixby, pero bajo el capó una parte de la “inteligencia” vendría firmada por este motor externo de IA.
Samsung seguiría así un enfoque parecido al de Siri con ChatGPT, donde el asistente actúa como puerta de entrada a un modelo más avanzado cuando la petición lo exige. La filtración apunta incluso a la posibilidad de iniciar sesión con nuestra cuenta para desbloquear funciones de pago dentro de este nuevo Bixby reforzado, replicando el modelo de acceso premium que ya se ve en otros asistentes con IA generativa.
Calendario, dispositivos y la pista de los televisores
La hoja de ruta que se maneja en estas filtraciones sitúa el arranque de esta nueva etapa a principios de 2026, coincidiendo con el lanzamiento de los Galaxy S26. Es en esa generación donde se espera que la integración entre Bixby y Perplexity desembarque primero con todo su potencial, como escaparate de las capacidades de la casa.
A partir de ahí, el plan pasaría por extender esta combinación de asistente e IA al resto de dispositivos Galaxy mediante una actualización de software. No se trataría por tanto de una exclusividad permanente de los modelos más caros, sino de un salto de plataforma pensado para arrastrar a buena parte del catálogo reciente de la marca.
Este acercamiento no nace de cero. Samsung ya lleva tiempo trabajando con Perplexity y sus televisores cuentan con una aplicación que da acceso a esta IA. Ese precedente ayuda a entender que la compañía vea viable apoyarse en el mismo socio para reimpulsar Bixby en el móvil, reutilizando parte del trabajo hecho en otros segmentos de producto y ampliándolo al terreno donde más visibilidad tiene: el smartphone.
Qué cambia realmente para el usuario de Galaxy
Si estos planes se materializan, el usuario se encontraría con un asistente más flexible. Las consultas del día a día -poner una alarma, controlar el hogar conectado, gestionar pequeños ajustes del teléfono- seguirían pasando por Bixby, que es quien conoce mejor el ecosistema Samsung y sus menús. Sin embargo, cuando se trate de preguntar por información actualizada, resolver dudas complejas o pedir explicaciones largas, entraría en juego Perplexity para generar respuestas más ricas y contextuales.
La experiencia ideal sería transparente: el usuario habla con un único asistente y no tiene que preocuparse de qué motor está respondiendo en cada caso. El reto está en que esa integración sea fluida y no genere confusión ni tiempos de espera excesivos cuando la petición se derive al modelo de IA más potente. También será clave cómo se integren las posibles funciones de pago para que no se perciba como un recorte artificial de capacidades.
Un movimiento con muchas incógnitas aún abiertas
Pese a todo, hay un detalle importante: Samsung no ha confirmado que Bixby reforzado con Perplexity vaya a sustituir a Gemini como asistente personalizado en sus móviles. La propia compañía mantiene que Gemini seguirá funcionando con normalidad en sus dispositivos, lo que deja en el aire si estamos ante un relevo, una convivencia o simplemente un experimento en ciertas gamas.
Esto abre varios interrogantes: cómo se presentará al usuario la elección de asistente, qué papel quedará para la IA de Google en los móviles Galaxy y hasta qué punto Samsung está dispuesta a depender menos de un socio tan relevante. Lo único claro por ahora es que la marca quiere recuperar protagonismo con su propia capa de IA, y que Bixby vuelve al tablero en un momento en el que los asistentes se juegan su futuro en plena fiebre por los modelos generativos.
En resumen, la posible alianza entre Bixby y Perplexity muestra que Samsung no se resigna a ceder el liderazgo de la inteligencia artificial en sus propios móviles a terceros. Si las filtraciones se confirman, 2026 puede marcar el inicio de una nueva fase en la que los Galaxy repartan tareas entre varios cerebros de IA, con el usuario en medio intentando sacar partido a ese equilibrio delicado entre potencia, comodidad y control.